La apertura de la economía mexicana transformó por completo la dinámica de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de los diversos estados del país, con una clara tendencia a concentrar el crecimiento en regiones específicas. En este estudio, cuantificamos el efecto derrame o indirecto de la complejidad económica sobre el crecimiento con base en los siguientes dos hechos: i) la complejidad económica es un factor importante para explicar las tasas de crecimiento del PIB, y ii) hay un patrón regional claro en la complejidad económica de los estados, i.e., la variable complejidad económica muestra una autocorrelación espacial positiva. Nuestros resultados muestran: i) que el efecto derrame o indirecto estimado de la complejidad en el crecimiento es positivo
y no insignificante, particularmente para los estados del norte del país, cuya propia complejidad económica es tan importante como la de sus vecinos. Por el contrario, el efecto indirecto en los estados del sur es negativo. Estar ubicado al lado de estados con bajos niveles de complejidad económica tiene una externalidad negativa significativa que casi anula el efecto positivo del propio nivel de complejidad de un estado. Nuestros hallazgos nos llevan a concluir que los efectos indirectos pueden haber jugado un papel más importante para explicar el patrón diverso de crecimiento entre el norte y el sur de México de lo que se pensaba anteriormente.
Gómez-Zaldívar, M., Fonseca, F. J., Mosqueda, M. T., & Gómez-Zaldívar, F. (2020). Efectos derrame de la complejidad económica en las tasas de crecimiento del PIB per cápita de los estados Mexicanos, 1993-2013. Estudios De Economía, 47(2), pp. 221–243. Recuperado a partir de https://estudiosdeeconomia.uchile.cl/index.php/EDE/article/view/59171